HISTORIAS CORTAS: "Hasta aqui..."




Mi Padre no era una persona que gustara de deportes, beber cerveza, no era un hombre de mecánica o herramientas, sus pasatiempos constaban de leer, ver las noticias, jugar solitario en la PC e ir a tomar cafe a su restaurante favorito.

Nunca le gustaron las mismas aficiones que a mi, no le gustaba mi ropa, ni mi música, mis parejas, nada realmente... no teníamos mucho en común, simplemente que eramos familia y punto. Lo cual para el estaba bien, “Era mi Padre, no mi amigo”, muchas veces discutimos por puntos de vista, creencias, practicas y modus vivendus, nos hicimos de palabras incontables veces y salimos enojados muchismas mas.

Un dia discutimos tanto que le dije hasta lo que se iba a morir, señale todos sus defectos y lo amenace con mis puños, era mas joven que el, mas agil, mas fuerte y estaba altamente entrenado, pero antes de siquiera asestar un puñetazo o una patada me dijo:

“Hasta aqui...”


¿Hasta aqui que? Conteste... y me conto una fabula de 2 chinos, padre e hijo de la época del emperador que discutian de la misma manera que el y yo, el pleito escalo al grado que se resolvió a golpes, ambos siendo maestros en kung fu dieron una ardua batalla hasta que el joven gano.

Tomo de la trenza a su padre (un peinado muy usual de la época) y lo arrastro por todo el pueblo humillándolo, demostrando que era mas fuerte que el, lo llevo hasta a un puente que llevaba al pueblo vecino, donde pensaba seguir arrastrándolo para demostrar que habia ganado, el padre se aferro al puente y no dejo que lo siguiera jalando y replico:

“Hasta aquí...”
¿Hasta aquí que? respondió el hijo...
“Hasta aquí arrastre a tu abuelo cuando tenia tu edad y hasta aquí me arrastraras tu...”

En ese momento me sentí impotente, desarmado y sin fuerzas, Mi padre sin haber levantado un dedo me habia derrotado... no supe que decir... me habia lanzado a un abismo el cual solo podia caer indefenso...



El me tomo del hombro y me dijo:

“Para detener hombres malvados violentos se necesitan hombres buenos que excedan en la violencia...”.

Después de eso, me abrazo y me solte a llorar, me habia enseñado 2 lecciones muy importantes que siempre se me quedaron grabadas para toda la vida...



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